Diario Septiembre
Este mes he empezado como monitora en el comedor escolar.
Pienso que he tenido suerte de tener esta oportunidad porque es una experiencia muy bonita trabajar junto a niños. Me gusta mucho la creatividad que pueden tener y también siento que son muy adorables, y también puedes aprender de ellos. A veces también es estresante pero es una experiencia que creo que me gustaría poder ir viviendo siempre.
Siento que para mí también está sirviendo como crecimiento personal porque no me sentía capaz de hacer algo así, pensaba que no era para mí. Pero también, al ver a otros compañeros, veo que todos podemos contribuir a nuestra manera en un proyecto.
También me hace recordar cuando yo era pequeña, y tenía esa inocencia y esas ganas de construirme un mundo para jugar. Podía montar una historia interminable con cualquier objeto u idea.
Se me hace difícil describirlo pero haciendo algo así me siento como yo misma, como algo que va conmigo. Hay veces que es difícil, como cualquier proyecto, pero siento que no se me hace tan difícil como esperaba. Creo que siempre hay etapas en las que te planteas si verdaderamente estás haciendo con tu vida lo que deberías hacer pero en éste caso no me arrepiento.
Puedo decir que tengo suerte con los compañeros de trabajo que me han tocado. Sé que será una experiencia que podré recordar siempre al igual que no quiero olvidar a la gente que está actualmente en esta experiencia conmigo.